El cepillo dental pierde su eficacia al cabo de tres meses de uso habitual.
Renovarlo al menos 3 veces al año es un hábito recomendable para no perder tiempo creyendo equivocadamente que limpiamos la boca.
El cepillo dental pierde su eficacia al cabo de tres meses de uso habitual.
Renovarlo al menos 3 veces al año es un hábito recomendable para no perder tiempo creyendo equivocadamente que limpiamos la boca.